pa quien lo quiera

  A dios rogando y con el mazo dando, se que en este blog he hablado muchas veces sobre las características de mi familia, con raíces religiosas (yo mismo estudie en un colegio religioso) a día de hoy no me considero una persona especialmente católica, por otra parte creo que soy bastante objetivo, no solo critico lo que para mi es la religión sino que también trato de ver cosas buenas en lo que considero una organización cada vez más decadente, avasalladora de poder y consecuentemente falta de moral tras las últimas décadas de escándalos. He de decir que en mi experiencia personal en torno a la religión siempre ha habido personas extraordinarias… pero a nivel global como todo gran colectivo hay personas repudiables, basura, monstros.   Como acabo de decir en todo gran colectivo hay malas personas y cuanto mas grande es dicho colectivo mas porcentaje estadístico de malas personas habrá (médicos, profesores, jueces…) lo que es inadmisible es que en un organismo que maneja la moralid

  Como de costumbre vuelvo a sentirme atrapado, no sé muy bien cómo ni por donde empezar, ni si quiera se lo que quiero decir, simplemente tengo la necesidad de escribirlo… supongo que el primer punto de esta exposición absurda y espontanea que nace y arde en mis venas a altas horas de la madrugada es el inconformismo, la ambición y la sensación de insatisfacción que me asfixia… insatisfacción por no estar a gusto conmigo mismo, por no tolerar mi propia personalidad, me gustaría ser diferente, controlar mi carácter, gestionar mis emociones y quizás trasmitir más alegría, no ser tan duro e impersonal, pero sintiéndolo mucho me es imposible, me es imposible fingir algo que no siento ,y si no estoy contento conmigo mismo ¿Por qué he de fingir que lo estoy? ¿para agradar a los demás?, no pido que se me comprenda o se me entienda simplemente que no se me juzgue injustamente al respecto, soy el primero que entiende que no tengo una personalidad fácil, no obligo a nadie a aceptarme, he tratad

  Reflexión “rápida”, se que es una temática que se sale violentamente de lo que suelo contar en este blog, aun así, estas son mis páginas, mis letras y cuento lo que siento lo que veo y lo que quiero, es la forma en la que entiendo la comunicación, sin ataduras, limites o censuras en un mundo que cada vez nos censura y nos impide hablar de lo que sea cuando sea. Hablemos de paro, hablemos de trabajo, hablemos de “ESCLAVOS” son tantas cosas las que he escrito, publicado y dicho en este blog que en verdad muchas veces ya no se si me repito o no, quizás la culpa la tienen las 100 entradas que tengo sin abrir al público, así soy yo, no esperéis lo previsible en mi desorden, creo sinceramente que el día que organice mis ideas será el día que me muera. Bien hablemos de esclavos, vivimos en esa maravillosa y ridícula mentira donde creemos que la esclavitud se ha abolido, que no hay esclavos, no existen, ahora dejemos de ser políticamente correctos y digamos que la esclavitud es

  ¿Como empezar a escribir en unos días tan duros como estos?, la hoja en blanco es como un muro el cual no se cómo afrontar… Cuanto antes lo haga, cuanto antes lo saque mejor.   La soledad, un tema recurrente cada cierto tiempo por aquí... Soledad, ese lugar que me hace sentir intranquilo, inseguro, triste, decaído, pero al mismo tiempo lugar que tanto necesito, inherente a mi, inspiración e incluso calma y paz dentro de la locura, cual línea fina casi inexistente que separa el miedo y el dolor del placer, a veces los extremos se tocan, ¿Por qué en ocasiones disfrutamos del miedo? ¿Por qué de vez en cuando necesitamos la oscuridad?, ¿Por qué siento que necesito la soledad?   Como de costumbre son preguntas para las que no tengo respuesta, a veces siento que es un monstruo que siempre me acecha, que nunca me deja, que constantemente está ahí, esperándome, es difícil de afrontarlo y asumirlo pero por mucho que lo desee arrancar de mi vida son muchas las cadenas que me hacen nece