pa quien lo quiera

Hace apenas un par de meses conocí a un chico un par de años mayor que yo, no lo había visto jugar a fútbol en mi vida, pero mi formación como podólogo y mi experiencia profesional me hizo darme cuenta enseguida que me encontraba ante un futbolista por la morfología arqueada de sus tibias, que es un rasgo muy llamativo de este deporte. Poco a poco fui indagando en la vida de este chico hasta que el mismo me confeso su pasado como futbolista y que lo había dejado no por tema de lesiones como fue mi caso ( TODA LA HISTORIA AQUÍ ), sino por culpa de una depresión. Con el paso de los días fui consiguiendo información sobre la vida profesional de este chico sin que nada me llamara la atención en exceso hasta que lo vi jugar un par de partidos y fui consciente de su extraordinaria calidad, un portero con unas actitudes increíbles , sin duda alguna de primer nivel, con piernas y brazos muy largos lo que lo dotan de una increíble envergadura sin restarle reflejos ya que su centro de grav

                            CAPÍTULO ANTERIOR  Como un necio me negaba inconscientemente una y otra vez que estaba enamorado de ti, me engañaba a mi mismo y a mis sentimientos con pensamientos que trataban de autoconvencerme de que no era así, que simplemente me parecías una chica guapa y muy simpática y nada mas y que eran los sentimientos normales de una amistad incipiente, aunque de sobra sabia que no era para nada así, que nunca antes en mi vida había sentido nada ni siquiera similar con cualquiera de mis amigas o las relaciones sentimentales que tímidamente había experimentado por aquel entonces, por mas que me dijera a mi mismo una y otra vez que no ya era adicto a ti, adicto a esa chica aparentemente tímida , inteligente y preciosa que sin hacer ruido se había clavado como un puñal en mi vida a base de sonrisas y pal a bras amables, con miradas cálidas consentidas por unos ojos inolvidables irrepetibles y únicos que con su luz propia cautivaban con su profundidad

Niego mi naturaleza constantemente, todo el mundo te dice que seas tu mismo, que hagas caso a tu corazón, yo mismo me lo digo, pero ¿Y si no pudieras hacer caso a lo que quieres o lo que sientes?. En mi día a día quiero comportarme y hacer cosas que no son políticamente correctas, que no son correctas en general, sin embargo considero que no estoy haciendo daño a nadie, pero la sociedad o el mundo en el que vivimos me obliga a comportarme de una forma que no considero como mía, una antigua pareja solía decirme que vivía siendo una persona que no soy y en verdad creo que es así, en mi día a día me esfuerzo por comportame de una forma “correcta” de buscarme un futuro una vida normal y cotidiana cuando en verdad lo que a mi me inspira y donde de verdad me siento yo mismo es la naturaleza y jugar en la peligrosa linea que divide lo ilegal y lo legal, no me mal interpretéis, no estoy a favor de robar o hacer daño a los demás, pero si de vivir una vida mas básica, moverme sin miedo por