2015 Y llega el gran premio de
suzuka, uno de los circuitos más bonitos y espectaculares del mundo,
el único circuito en forma de 8 del mundo, paradojicamente el año
pasado en este circuito en forma de 8 y en la curva 8 viviríamos
la noticia mas trágica en las últimas dos décadas de formula uno,
como premonición de la catástrofe ese medio día en japón el cielo
se caía a pedazos, ese día en la curva 8 sería la última vez que
veríamos volar a Jules Bianchi sobre la pista tras una terrorífica
carambola, pues de 18 curvas que consta el circuito y cientos de
miles de metros en escapatorias Jules tubo que salirse justo en la
curva 8, justo en ese intervalo de espacio que ocupaba la grúa,
que casualmente se encontraba retirando un coche que se había salido
sin consecuencias apenas unos segundos antes, ni un solo metro a la
izquierda o a la derecha, justo en la posición exacta para que
prácticamente el 100% del impacto lo reviviera en la cabeza. Por
desgracia, es a lo que te expones hoy en día en F1, no olvidemos
que es un deporte de riesgo, solo una carambola macabra puede
costarle la vida a un piloto. Ese 5 de octubre no sería la fecha
efectiva del fallecimiento de Jueles, pues el todavía tenia algo que
decir en esa lucha que terminaría perdiendo el 17 de julio de
2015 después de un agónica batalla.
No creo que lo sucedido con
Jules, sea una falta de seguridad, simplemente como dije antes se
trata de f1, aunque no lo parezca es un deporte de riesgo y los
pilotos se juegan la vida en cada curva... por suerte cuando se
produce una muerte o un traumatismo grabe en el mundo de los
monoplazas en general se debe a autenticas carambolas, como lo que le
paso a Jules, massa o Justin Wilson, son cosas absolutamente
impredecibles que no se pueden controlar por mucha seguridad o
medios que pongamos en ello, la única solución
es cerrar los cockpic, esta más que probado que la única
causa de muerte puede ser una pieza o algún cuerpo que salga
disparado y golpee en la cabeza al piloto, hemos visto impactos a más
de 200 o incluso casi 300 km/h contra muros u objetos contundentes
sin que sucediera nada, sin embargo lo peligroso de verdad son las
piezas que rebotan y que pueden perforar el casco a pesar que estos
estén echos a prueba de balas, a día de hoy son todos los
antecedentes de la F1, la seguridad es extrema, solo una
casualidad prácticamente imposible puede provocar la muerte, pero
por desgracia lo imposible a veces también sucede, el muelle de
masa que bota dos veces en la pista y le impacta en la cabeza, la
rueda o o la pieza del alerón de Henry surtess y Justin Wilson,
cosas que una milésima antes o después simplemente no hubieran
sucedido, pues en una milésima de segundo a 200 km/h avanzas
casi 6 centímetros, distancia suficiente para que dichos proyectiles
nunca hubieran impactado contra las victimas, supongo que es lo que
hay, en los deportes de motor cada milésima cuenta para lo bueno
y para lo malo.
Lógicamente cuando alguien fallece
es muy fácil acordarse de lo bueno y engrandecer a la persona que a
perdido la vida, pero en este caso, desde las declaraciones de toda
la familia de la f1 hasta las imágenes del entierro se ve una
terrible crudeza y dolor en todas y cada una de las personas, lo que
deja más que claro que Jules en realidad era un chico sencillo y
normal en su día a día, no se trataba de chapa y pintura lo que
hace si cabe aun más dura su prematura perdida.
Sabes que un piloto es especial
cuando acaba 8º (9º por una sanción de cinco segundos) con un
marussia, el peor coche de la parrilla de largo. Gracias a
ese octavo puesto y a los 40 millones que supuso en el mundial de
constructores manor está hoy en día en el mundial.
Todos los pilotos de la actual parrilla que coincidieron con él en
otras categorías señalaban que era un piloto diferente un
campeón...Todo apuntaba a que esta temporada sustituiría a
Raikkonen en Ferrari ya que formaba parte del programa de
desarrollo de la escudería italiana. No pudo ser, al menos gracias
a él miles de personas conservan su trabajo y nos a dejado una de
las mayores gestas sobre la pista, algo que ni Hamilton, Alonso o
Vettel han logrado, terminar por delante de 14 coches con el peor
coche de la parrilla.
En todas las competiciones en las
que participó Jules acabó siempre entre los tres primeros en la
clasificación general, a excepción de F1. Jules demostró con
creces en la pista sus capacidades y su potencial, por desgracia
nunca podremos saber a donde podría haber llegado, al menos nos
queda esas vueltas en Mónaco, su agresividad en los
adelantamientos y su suavidad en curva, pocos pilotos podrán
conseguir terminar en el podio de todas sus competiciones previas a
formula 1 y lo que es más importante solo unos privilegiados son
capaces de ganarse el cariño y la admiración de todas
las personas que le rodean, sin duda una suerte haber convivido
con él y un ejemplo de lucha para tantos y tantos jóvenes pilotos.
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