Futuro sin futuro y destino sin dirección

 

Tengo miedo de vivir, tengo miedo a mi vida actual, estos últimos meses no han sido fáciles para mí, no han sido fáciles para mi familia, no han sido fáciles para la humanidad en general, una pandemia, una situación inédita, algo para lo que no estábamos preparados nos ha golpeado con fuerza a todos, ante lo inesperado y novedoso es comprensible que aparezca la incertidumbre, los errores y la mala gestión. Al igual que millones de personas en el mundo en estos momentos tengo miedo del futuro, tengo miedo por los míos, tengo miedo por mi vida… Estos meses me han arrebatado a mi madre, me siento solo, vacío, casi sin fuerzas, tengo ganas de continuar, tengo ganas de luchar pero por primera vez en mucho tiempo no encuentro una salida, una solución, esa lucecita de esperanza que me lleve a ser mas optimista, tengo miedo por mi familia, por seguir perdiendo a seres queridos sin yo poder hacer nada al respecto, siento impotencia de no haber podido hacer algo mas por mi madre, por no haber sido comprensivo, por no involucrarme con mas cariño y de una manera mas empática con ella y su enfermedad y mas aun si ponemos en la balanza que soy sanitario y que siempre me he peleado a capa y espada por una medicina mas cercana a las personas y algo mas alejada de dinero y el prestigio, siento que yo, justamente yo, esa persona que ha luchado y a peleado por la parte humana de la sanidad, por esa comprensión y cariño hacia el paciente independientemente de su raza o estrato social, precisamente yo he fallado en todo eso con mi madre, he engañado y pervertido mi propia forma de ser, he tratado mejor a mis propios pacientes que a mis familiares, he sido mejor con extraños que con los míos.. no puedo expresar con palabras la sensación de impotencia y decepción que siento conmigo mismo al no haber estado a la altura de mi madre, el no haber sabido tratar su enfermedad será algo que me lleve a la tumba para siempre y que me acompañara día a día en mi práctica clínica, supongo que se trata de la mas cruel y valida lección que he recibido en m vida, pues en efecto mi madre hasta en su muerte ha servido de inspiración y aprendizaje en mi vida, algo que jamás podre devolverle ya, solo me queda ser el mejor profesional posible para poder así ayudar a los demás de la forma en la que no pude ayudarla a ella para así de esta forma tratar de honrar su memoria, devolviendo esperanza y alegría a personas que acudan a mi en busca de ayuda, lo haré por ti mama.

 

La vida me ha arrebatado cosas, muchas cosas y no contenta con ello decide seguir arrebatándome todavía más, no se hasta que punto pretende seguir apretando el lazo pero por el momento no tengo ganas de rendirme, tendré miedo, pero también tengo fuerzas. No pienso entrar al eterno dilema de “no te quejes porque siempre habrá alguien que lo este pasando peor que tu” me parece hipócrita y mezquino que la desgracia de otros sea nuestro propio consuelo, pero ello tampoco te exime a ti de sufrir tu propio presente, las situaciones difíciles van a seguir estando ahí, de nada vale que te reconforte saber que hay alguien en alguna parte del mundo con una vida más difícil que la tuya, lo que debes hacer es tratar de poner solución a esas dificultades no tratar de buscar excusas ridículas para encontrarte mejor contigo mismo. En mi caso soy perfectamente consciente de que mi situación no es tan delicada o dramática como quizás la veo yo, pero aun así es difícil levantarse sabiendo la dura losa que tienes encima, no solo sufro por mí, sino por la gente que me rodea, se me pasan demasiadas cosas por la cabeza, demasiadas ideas y pensamientos y ninguno acaba de darme una solución realmente alentadora para mi o los mios…No se que hacer, no sé cómo seguir, no quiero ver como mis seres queridos sufren de nuevo, pero en verdad no encuentro el camino, parece que por mas que me esfuerzo las cosas están escritas para salir mal una y otra vez, parece que cuanto mejor persona soy peor salen las cosas y cuanto peor persona soy mejor me salen, quizás la  respuesta esta en traicionar mis principios y pasarme al bando de los malos…No lo se, no quiero hacerlo pero en verdad la situación en mi vida vuelve a ser muy muy peliaguda para mi y para los que me rodean, el resumen tengo 28 años 6 operaciones quirúrgicas, he vivido en 3 países diferentes 7 ciudades distintas y 9 casas diferentes ir por el mundo esta bien, pero estoy un poco harto de no encontrar mi lugar, estoy harto de no poder encajar, de que la vida no me deje vivir y me arrebate cada dos por tres lo que me hace feliz y no poder hacer feliz a los demás.