¿Sabemos ayudar? ¿Como prestar ayuda?

Por lo general me gusta ser optimista en este tema, creo que la gente es muy generosa de por si, buena, honesta; es el sistema el que nos pervierte, nos corrompe y trastorna, aun asi en lineas generales y por experiencias personales creo que las personas somos buenas por naturaleza, solemos ayudar y compartir mas de lo que quizás en un principio pueda parecer, o al menos en España.

Mi país lleva 32 años siendo el país con mas donaciones de órganos a nivel mundial, somos uno de los países que mas comida dona a los bancos de alimentos de media por habitante y también tenemos unas políticas sanitarias, de educación y de ayudas públicas mas inclusivas del mundo (quizás este sea tema de otro post) Con todo esto y miles de datos mas similares a lo largo del mundo, cada país con los suyos propios, quiero exponer que por lo general el ser humano de a pie, la clase media es empática, comparte y es generosa, da propinas, dona comida y ayuda a quien lo necesita en la medida que a cada cual nos es posible, pero ¿Sabemos ayudar? ¿Hay una forma correcta de ayudar?

La respuesta tristemente es que por lo general no sabemos ayudar o no ayudamos de la forma mas correcta y adecuada posible, pondré algunos ejemplos, muchas veces el concepto de ayudar lo simplificamos en darle todo a la otra persona, por ejemplo: una infancia de ensueño a nuestros hijos con mil juguetes y comodidades, quitando responsabilidades a gente de nuestro entorno por que tienen mucho que estudiar o que trabajar, dando comida constantemente en determinados círculos, ayudas económicas etc.

Muchas de estas ayudas no son ayudas en si mismas, son parches que lo único que hacen es crear un problema mayor. Cuando tenemos algo que no funciona bien la solución no es arreglarlo a base de dinero o solventando el problema de golpe y porrazo, tienes hambre te doy de comer, necesitas dinero te doy dinero, ¿así solucionamos el problema o ponemos un parche?, si le damos de comer a quien tiene hambre en menos de 24 horas volverá a tener hambre otra vez, si le damos dinero a quien necesita dinero en un mes aproximadamente volverá a necesitar mas ¿No sería mejor tratar de averiguar la causa y solventar el problema de raíz? Quizás si lo hacemos la persona que pasa hambre el día de mañana sea capaz de obtener su propia comida y no necesitar ayuda nunca mas, la persona con problemas económicos orientando su situación quizás consigamos ajustar sus cuentas o encontrar un empleo y que deje de ser dependiente. Si nosotros mimamos en exceso a nuestros hijos los haremos débiles el día de mañana en el mundo extremadamente competitivo en el que vivimos, es necesario ya a tempranas edades ir adquiriendo responsabilidades acordes a nuestra etapa de crecimiento para así, desde el principio, irnos desarrollando como personas y que la vida de adulto no nos pille en calzoncillos.

A lo mejor por haber crecido en una generación donde lo tenemos todo al alcance de un clic somos emocionalmente mucho mas débiles, por que la cultura del esfuerzo y la responsabilidad a desaparecido de nuestra infancia, no digo que con 6 años vayas al campo a trabajar y tu vida dependa de que trabajes de sol a sombra, pero si al menos forjar mentalidades robustas con responsabilidades acordes a tu edad, ya nadie coge apuntes con papel y boli, ya no se hacen dictados, nadie va a consultar libros o enciclopedias y copiar a mano o redactar bibliografías a las bibliotecas. Ese tipo de conductas fundadas en el esfuerzo hacia a las personas conscientes de lo que cuesta alcanzar algo, el exceso de ayuda por parte del entorno social a largo plazo nos acaba penalizando si no somos plenamente conscientes que las ayudas, sociales, públicas o familiares nos hacen dependientes no independientes, si bien son necesarias y en muchos casos vitales para darnos un empujón, debemos de entenderlas como algo temporal no como una constante. Hoy queremos inmediatez y facilidades y la vida no es así, fruto de ello la crisis de salud mental que experimentamos en esta década, donde por norma general, (y no quiero meter a todo el mundo en el mismo saco por que este es un problema que ha existido y existirá siempre) obstáculos casi insignificantes se concierten en insuperables y motivo de colapso emocional, el simple salto a la vida laboral para para infinidad de jóvenes supone un gran trauma, pues tras años de estudios, masters, cursos y demás te plantas con 30 años en una vida en la que no has sido responsable de nada, tu primer jefe, riña, discusión o escollo laboral se convierte en algo insalvable, ningún trabajo te gusta, te convence, te frustras y consumes emocionalmente, la vida es así, nadie comienza en la cima, para ganar primero hay que sacrificarse y demostrar muchas cosas, siempre ha sido así, tus abuelos de una situación dantesca de posguerra siendo en muchos casos analfabetos consiguieron salir adelante, comprar casas, coches y todo ello de la mano de una voluntad de hierro y un instinto de superación incomible, aspectos de los que quizás carecemos mas hoy en día.

Con esto no quiero decir que las nuevas generaciones no tienen problemas nuevos, sin duda que si, hay muchas ventajas con respecto a hace 70 años pero también inconvenientes, como la dificultad de acceder a vivienda, inestabilidad económica etc, pero al mismo tiempo con el paso de los años tendemos a sociedades caprichosas y de cristal donde la capacidad de superación o de asumir el fracaso y la derrota se esta perdiendo, es por ello que es importante saber ayudar y aprender a ayudar, como he expuesto al principio, darle todo a nuestros hijos no nos hace mejores padres, esa ayuda provoca inevitablemente problemas futuros, dar ayudas económicas a la población es positivo si incentivas el esfuerzo, un empujón, no como método para que la sociedad se apalanque y se conforme a vivir con medio sueldo por que prefiere estar en casa y ganar 500€ por no hacer nada a tener que trabajar y madrugar por 1000€ estas son ayudas mal entendidas o falsas ayudas, al igual que lo es darle pastillas sin ningún tipo de control o seguimiento a una persona con depresión, procrastinar tareas en familiares o amigos, posponer deberes o responsabilidades… y un largo etc sobre el cual os dejo a vosotros reflexionar ahora.

La importancia de querer ayudar y de saber ayudar para no crear un futuro de cristal donde todo nos venga dado, donde si no nos dan nos sintamos discriminados, donde la mejor ayuda sea un golpe de realidad a tiempo que nos haga darnos cuenta que somos unos privilegiados por tener un techo y un plato de comida y sobre este privilegio crecer con mentalidad de esfuerzo y superación siendo auto suficientes e independientes y no buscando y dependiendo de falsas ayudas de los demás que sabotean nuestro futuro mas cercano.